Tendecias en Manufactura en México
El 2019 fue un año muy significativo para Estados Unidos. El 2020 ha sido un año que ha cambiado las estrategias y las formas en las que las empresas trabajan, gracias a la guerra comercial con China y la actualización del tratado entre Estados Unidos, México y Canadá varias empresas empiezas a considerar la opción de cambiar sus operaciones internacionales de China a México, o expandirse por primera vez.
LA CERCANÍA A MÉXICO, ACERCA LA PRODUCCIÓN A CASA.
Desde 1960 se ha contado con la presencia de fabricantes estadounidenses en México, sin embargo, a finales de la década de 1990 y a principios de 2000, muchos productores recurrieron a China por ser una alternativa con menores costos, y como toda estrategia el trasladar su fabricación a China tenía pros y contras. Uno de los contras y riesgos y más importantes con la producción en el mercado chino era el problema de imitación del producto, ya que, las reglas y regulaciones de protección de la propiedad intelectual están ausentes. En muchos casos, había imitaciones hechas por China en productos que fabricantes de Estados Unidos habían desarrollado, trayendo como resultado una reducción del mercado y reducción en la rentabilidad de los fabricantes estadounidenses. Pero un pro, y que era lo que llamaba la atención a los fabricantes de Estados Unidos, era que los costos de mano de obra eran tan bajos que las empresas estaban dispuestas a arriesgarse y perder propiedad intelectual en el largo plazo con el fin de obtener beneficios económicos en corto plazo.
Nearshoring en México se volvió más atractiva cuando la producción china a partir del 2015 empezó a presentar un aumento en la mano de obra. A medida que aumentaba la mano de obra, también aumentaba el costo del producto que se fabricaba en China. En el 2016 los salarios de las fábricas en China, alcanzaron un pico con un aumento del 64% desde el 2011, con un salario promedio de $3.60 por hora. El aumento continuó y ahora el promedio por hora es de $4.95, ya que el país también enfrenta su población en edad laboral más baja en una década.
Por otro lado, en términos de costos laborales México ofrece una estabilidad, creciendo a un ritmo similar al de la inflación en 4%-5%, con un salario promedio de $4.00 por hora.
Asimismo, China asumió el costo adicional de tener más inventario y el tiempo promedio para que los productos fabricados en China llegaran a Estados Unidos eran de 30 a 40 días, mientras que las herramientas y productos hechos en México pueden enviarse por camión y ferrocarril y llegan a Estados Unidos en 2 o 3 días. Gracias a esto, las cadenas de suministros más cortas dan como resultado la capacidad para reducir el tamaño de los inventarios y reducir los costos de transportación.
Para muchos fabricantes, el nearshoring en México no se trata de eliminar todas producciones en China, sino que, en algunos casos, establecer la producción más cerca ayuda a diversificar la cadena de suministro. Asimismo, México ofrece una gran proximidad a los mercados estadounidenses, fuerza laboral joven con salarios competitivos, actualizaciones de herramientas y en MRO, y, por último, protección de la propiedad intelectual, haciendo que sea una opción de selección de sitios deseable.
NUEVA ADMINISTRACIÓN, NUEVAS LEYES
Con el cambio en el gobierno, las nuevas leyes que hay en México entraron en vigor este 2020. Una de las más notables es el proceso para obtener permisos de empresas estadounidenses o extranjeras que quieran comenzar a fabricar en México. Antes, el personal del Ministerio de Economía realizaba las inspecciones del programa de IMMEX para aprobarlas, y realizaba visitas a las instalaciones para garantizar el cumplimiento antes de que un proyecto iniciara. Este proceso duraba entre 2 o 3 semanas. Sin embargo, con la nueva administración, estas inspecciones ahora las realiza un notario local que no cuenta con la experiencia en la fabricación, y son responsables de presentar sus informes al Ministerio de Economía; su trabajo es documentar bajo juramento que la empresa que quiere unirse al programa de IMMEX cumple con todos los estándares requeridos. Dicho mandato, ha afectado el proceso de aprobación ya que de durar 2 o 3 semanas como máximo, ahora se extiende hasta 30 días o más, según la carga de trabajo del Ministerio de Economía y sus criterios, si todo está de acuerdo se aprueba el programa, pero de no hacerlo, se debe enviar de nuevo la solicitud y esperar otros 30 días más; esto es un ejemplo de las reglas que las empresas deben considerar y cumplir si desean fabricar en México.
Por otro lado, los servicios de refugio (shelter services) siempre han sido de gran importancia en la fabricación en México, pero ahora se han ampliado gracias a las regulaciones que se implementaron en el 2020.
Además de ayudar a los fabricantes con el cumplimiento cuando inician operaciones en México, uno de los pasos iniciales para trabajar con una empresa shelter, es seleccionar el lugar. Aunque se sabe que Tijuana tiene un mercado activo gracias a la proximidad con la frontera, hay una baja tasa de desocupación y los costos de construcción han empezado a aumentar. Otras opciones son Mexicali y el centro de México, en donde las tarifas de construcción no son tan caras, sin embargo, cada área es diferente y los precios se determinan por la demanda.
Cada región es conocida por un campo especializado, en donde la mano de obra calificada ya está establecida; las principales áreas que son asociadas con la fabricación en México son las siguientes:
- Aeroespacial: Tijuana, Mexicali, Hermosillo, Monterrey, Nogales, Saltillo y Chihuahua.
- Automotriz: Tijuana, Mexicali, Hermosillo, Monterrey, Nogales, Saltillo, Chihuahua, Juárez, Aguascalientes, San Luis Potosí, Querétaro, Silao, Celaya, Puebla y León.
- Electrónica: Tijuana, Mexicali, Hermosillo, Monterrey, Nogales, Saltillo, Chihuahua, Juárez, Tecate, Querétaro, Aguascalientes, San Luis Potosí, León y Guadalajara.
- Dispositivos médicos: Tijuana, Mexicali, Hermosillo, Nogales, Chihuahua, Juárez y Tecate.
Una empresa de Shelter, puede proponer regiones en las que las instalaciones mantengan un nivel más alto de estabilidad de costos y que además sean propicias para una industria en especial.
CAMBIOS POST PANDEMIA
Por último, con la pandemia del Covid-19 han llegado especulaciones sobre cómo será la nueva normalidad o cómo será el mundo pasando el coronavirus. Sin embargo, es casi seguro que la propagación del virus motivará a los fabricantes a recurrir cada vez más al nearshoring en México.
Matt Brady vicepresidente ejecutivo y Andrés Galvis director regional de operaciones latinoamericanas de la empresa Ware Malcomb, mencionan que muchas operaciones extranjeras de empresas de Estados Unidos están considerando y examinando las perspectivas de la fabricación en México, y dichas actividades conducirán a un resurgimiento del nearshoring en México en la post pandemia.
